Olivier, un joven
francés de 23 años, y su pareja, Wilfred de Bruijn, un holandés de 38,
paseaban por la calle.
“Volvíamos a mi casa después de haber estado en una fiesta con amigos”,
recuerda De Bruijn. “Íbamos agarrados del brazo, tranquilos y contentos,
y de repente vimos a un grupo de cuatro o cinco jóvenes acercarse.
Dijeron: ‘¡Mira, dos homosexuales!’, y empezaron a pegarnos. Lo
siguiente que recuerdo es la ambulancia. A Olivier le pegaron un golpe
en los ojos y cuando se recuperó vio a cuatro de ellos pateando mi
cabeza como si fuera un balón de fútbol”.
Esto se da en Francia, el país que inventó los derechos humanos y que hoy en día es un país receloso en el que proliferan las homofobias.
Está es una reflexión que hizo uno de los agredidos:
“Los que se
oponen a la ley dicen que no son homófobos, que solo les preocupa que
los niños no sean criados por un padre y una madre”, argumentan. “En
realidad, están diciendo que los gais somos diferentes y no debemos
acercarnos a los niños. Como si fuéramos perros peligrosos. Yo les diría
a ellos que no dejen a los curas acercarse a sus hijos, y temo mucho
por sus niños, que están aprendiendo en casa que los gais y las
lesbianas somos el demonio”.
En mi opinión no se que tiene la gente en contra de los homosexuales, son personal normales, iguales a ellos, pero con distintos gustos. Lo único que
quieren como el mismo dice es "vivir libres, iguales y con dignidad" y
tan sólo piden esto, pero parece ser que hay gente en este mundo que
siguen sin querer que ellos tengan estos derechos.
El problema de
todo esto es que si la Iglesia con tanto poder sigue presionando y
haciendo creer a la gente que la homosexualidad no es buena, toda esta
gente quedará excluida, sin derechos ni tampoco igualdad como se
merecen.
procedencia
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