La defensa de un partido derrotado

Estos días, estamos viendo un cambio político hacia la derecha en Europa. Podemos ver cómo son los partidos neoliberales que gobiernan Europa y cómo en los demás países se está votando a la derecha.

Debo decir que las elecciones de Andalucía y Asturias han sido un alivio para mí. No digo esto por mis ideas políticas personales, ni para hablar de partidos; lo digo porque los extremos nunca son buenos. Creo que la democracia se puede representar con una metáfora divertida de un paseo. Creo que en el paseo de la democracia tenemos que andar con los dos pies, que son las culturas, uno izquierdo y otro derecho, y los zapatos serían los partidos. Parece un poco ridículo, pero se asemeja a la realidad. Si vamos paso a paso, usando los dos pies, andamos rápido. El problema es que, si empezamos a saltar a la pata coja, ¿qué pasa? Qué nos caemos.

Sin esa alternancia es un gran problema andar. Es mejor dar un paseo con ambas piernas, y además, que si nos caemos, no nos podemos levantar con un pie, necesitamos los dos. Y mejor si andamos con unas buenas zapatillas.

Toda esta un poco ridícula metáfora, si me lo permitís, me permite  llegar a la idea de  que con un país gobernado solo por un partido, sea cual sea su signo político, no es bueno, es mejor mediante la cooperación y la alternancia para evitar los extremismos.

Por ello, en mi opinión, sí es bueno que en Andalucía y Asturias haya ganado otro partido, ya que darán "codazos" para evitar un extremismo. Eso si, esto lo quiero dejar claro, opinaría lo mismo si fuera al contrario. Los extremos nunca son buenos.